Concierto

LOS CONCIERTOS, ESOS GRANDES AMIGOS

¿Alguna vez habéis sentido la emoción de acudir a un concierto? El corazón se acelera, tanto que casi no puedes ni respirar, estás en primera fila rodeado de miles de personas que casi no te dejan espacio ni para moverte ligeramente, ansioso porque salgan tus artistas favoritos al escenario. El tiempo de espera se hace lento, sobre todo porque sientes el calor humano del resto de personas, que están tan ansiosas como tú...

Sin duda la música tiene un extraño poder, reúne más personas que el deporte, tiene algo que siempre llama la atención allá por donde va. Da igual si son hombres o mujeres, simplemente tiene algo que te cautiva. En mi caso me gusta la música rock, el metal y la música clásica, me dejo guiar más por el sonido que por la letra, porque se puede tener una gran voz sin llegar a decir nada, el mensaje lo da más el sonido que la letra, de hecho la música clásica lo ha demostrado en muchas ocasiones. Para letras bonitas... lo siento existe poesía, no creo en las letras bonitas, yo creo que la armonía del sonido es mucho más...

Y estoy seguro de que muchos dirán ¿Y qué armonía hay en la música heavy?, Si no la has escuchado no puedes saberlo, tienes que escuchar para entender, pero hay mucho más de lo que parece... todo depende de con que oído escuches, pero hay que ser conscientes del gran esfuerzo y sacrificio que requiere la música.

¿Qué respete el reggaetón y el pokey?, lo siento, no puedo respetar a unos tíos que se aprovechan de la música para hacer negocios sucios y que el mayor esfuerzo que hacen para "componer" su "música", es sentarse delante de un ordenador y darle a un botón para que suene el mismo ritmo machacante una y otra vez...

Ellos no han tenido que aprender a tocar un instrumento, ni saber cantar y por supuesto nunca han pensado ni se han rebanado los sesos por agradar a su público y ser distinto a los demás.

Por eso me gusta tanto los conciertos, y en general la música que escucho, no veo a personas obsesionadas por el dinero, veo a personas obsesionadas por la música, por tratar de hacer algo que a ellos les gusta y que haya alguien que lo entienda, por ello, antes de meteros con ellos y llamarlos satánicos y rebeldes, pensad en todo el maldito esfuerzo que les costó llegar hasta allí y les convirtió en estrellas.
Cuando salgo a un concierto veo todo ese esfuerzo plasmado sobre un escenario, por eso creo que la gente lo clama tanto, hay más fuerza que en el trabajo que se ha grabado es como si cada nota, cada grito fuese el último. Yo a veces pienso que merece la pena estar vivo aunque sea sólo para un momento como ese, podéis llamarme exagerado, pero para mí la música es una forma de expresión, es arte, es magia, es algo por lo que merece la pena estar vivo.